viernes, 3 de marzo de 2017

No importa.




M
e hago viejo recuperándome de esa enfermedad que creí crónica en la versión (nada me puede) me refiero a la juventud. Ahora comienza a imponerse el (no importa) tras superar la etapa del (yo puedo.)
Como citó Benedetti si mi memoria no me falla, “La arruga no es tara más bien medalla.”

Cuidado, no vayas a pensar que soy viejuco de primera división, aunque si lo piensas no importa, tengo 45 años aparentando lo que aparento porque en realidad no importa (…) Es camino despejado y sin baches este principio de etapa que si fuera al contrario no pasaría nada pues no importa.

El único lujo que tenemos los de a contracorriente es deshacernos de lo inútil aun reportando justamente esa imagen porque no importa. Somos salmón que abandona salada adentrándose en la dulce para escalar cauce esquivando variopintos depredadores y terminar nuestra existencia en el plácido lago de nuestra verdad. El resto adulterado simplemente no importa.

Parte de la base empatía y ofrece aquello que demandas, pues amor con amor se abona, respeto con respeto, prepotencia con prepotencia, odio con odio… Aunque en realidad hagas lo que hagas alejado/a de la cercanía sapiente compartida con el resto, no importa.

La vida es un guion en blanco dispuesto a albergar toneladas de sucedáneo si así lo decide su propietario, cosa que poco o nada importa al existir cura, la propia muerte, que cuando enseña tez advertencia en la existencia de cualquier superficial, merma su estar tomando consciencia que casi toda su creencia es papel mojado, o dicho de otra manera, nada de lo importante que creyó importa. Retomando senda o recuperando cordura.

P.D. Mi consejo es sencillo, no temer a la soledad si llama a tu puerta pues entendida se convierte en aliada, aprender a decir que no, abandonar antes de matar o malherir, y nunca jamás jugar con la manipulación al ser amago o rebote que acaba manipulándote en universo falaz.

La franqueza y ecuanimidad con uno mismo no es un don, es pura y neta necesidad… Todo lo demás… NO IMPORTA.

Con la presente expresada desde el púlpito del compartir, me regreso a mi universo feliz de las letras, no sin antes, desearte de lo bueno lo mejor con un hasta entonces, hasta ahora.

©Dadelhos Pérez