miércoles, 12 de julio de 2017

Imposible absurdo



Qué ternura aflora en vastos plegados al momento imperante, sentencia asumida en efímero desgaste que lo convierte en pasado por presente marcado con la misma tara. Resulta quijotesco aún gobierne el tiempo lo inmediato para quedar vivo lo consumido que resucita en el recuerdo.
Sólo pretendo pretenderte con magia ósculo, mi dama; pues encendiendo la chispa paraliza al que nunca para ganando lustro largo... De pasiones puras, nítidas...humanas.
Que sí, muy bonito...
Más bien aventurado, princesa (…) ¿nos besamos?
Todas las mañanas lo mismo, señor. Soy una mujer casada, no me interesa...
Menuda condena me tara...
...Diga lo que diga, el billete del bus sigue costando lo mismo que ayer...
¿Oda laborada desde el alma? con trazas sensuales o apasionadas...directo al meollo haciéndola volar con húmedo...
No, pervertido educado, 4,25.

PD. La idealización suele imponerse a la petición amatoria, rezan describiendo ellas al perfecto caballero y ellos a la más esbelta. Alguna queja antes de aseverar dictamen para acatar gélida realidad.
Lo caballeroso en oda bella recitada con justo tono a la pretendida, simplemente es lo caballeroso en oda bella recitada con justo tono a la desinteresada, más 4,25...Adoro lo absurdo por encontrarme en mi salsa.
Con este intento intentado, me despido no sin antes desearte de lo bueno lo mejor, con un hasta entonces...Hasta ahora...

Dadelhos Pérez